José Mujica

    La unidad de medida estándar para el cableado AWG (America Wire Gauge) establece las fórmulas para determinr el diámetro de los diferentes cables. Dependiendo de la aplicación vienen siglas de las características con respecto al aislamiento, los factores climáticos y retardantes de flama. En el caso del Audio siempre se debe calcular continuamente la cantidad de cables de determinado tipo que pueden pasarse por un diámetro dado de tuberías. A pesar de que existen calculadoras en la Web que ayudan al diseñador en este sentido, no existe un criterio unificado debido a que muchas de éstas calculadoras las suministran los fabricantes en su web para sus productos. Pero puede bastar que cambies de fabricante para que esos cambios ya no funcionen. La propuesta para esta tesis es elaborar una calculadora unificada con una base de datos de los cableados estandarizados a los fines de que al solo seleccionar un tipo de cable y una tubería dada de una tabla se pueda determinar de inmediato cuántos cables podrán pasar por la misma.

     La base de datos debe ser abierta porque puede darse el caso que un cliente nos suministre una muestra del cable y debamos medirlo con un Vernier para determinar su diámetro externo para introducirlo en nuestra calculadora. Para determinar la cantidad de cables a acomodar existen también unas normas que debo averiguar sobre el espacio de holgura dentro de la tubería. Si la tubería ha de tener curvas en su recorrido, debe haber una holgura suficiente para que los cables no sean forzados mecánicamente.

     La parte más delicada de este trabajo es con respecto a las nomenclaturas del cableado, es muy posible que debamos tener en esa base de datos los modelos de cables de las marcas más reconocidas a nivel profesional, tales como Belden. Allí se presentará un problema debido a que solamente este fabricante tiene más de 100 variantes de cables distintos. En un país como el nuestro que pertenece al tercer mundo, la disponibilidad de modelos de cables no es amplia. Por tal razón no puedes regirte en extremo con la existencia de un momento. Por ejemplo supongamos que estás elaborando un proyecto para una obra que comenzará dentro de dos meses. Calculas los diámetros de la tubería basado en el modelo de cables que tienen los proveedores en el momento. Pero cuando vas a ejecutar la obra te encuentras que los distribuidores ya no tienen esa serie, que el nuevo lote es otro con un diámetro de doble espesor.

     La sobredimensión es un recurso al que no se recomienda recurrir y mucho menos en momentos de desesperación. Debemos tener en cuenta que hoy en día muchas instalaciones deben manejar decenas de cables y en ocasiones de gran calibre, por ejemplo en el Teatro Teresa Carreño se emplearon 38 cables AWG#10 del tipo THW con una longitud cada uno de 125mt. Igualmente hay más de 112 cables de línea AWG#20. Estos son casos donde una variante en las dimensiones puede resultar en un presupuesto exorbitante.   

El método matemático
Para los que gusten de los números, la forma de calcular cuántos cables pueden acomodarse en una tubería se toma la mitad del diámetro de la tubería en centímetros, se eleva al cuadrado y se multiplica por la constante Pi. Se repite la misma operación para el cable en cuestión llevando sus valores a centímetros. Finalmente se divide el área de la tubería entre el área del cable y obtendremos un aproximado serio de la máxima cantidad de cables que podrían entrar en la tubería.